Hola, me llamo Natalia y mi estancia en el Hospital ha sido un poco dura al principio. Me conozco el Hospital muy bien porque desde pequeñita me han ingresado tres veces. Esta última vez lo pase mal. Me tenían que meter un tubo por la nariz debido a que me dolía mucho la tripa y no tenia ganas de comer. Al principio fue muy duro, el primer día no me lo pudieron meter porque no me dejé, me dolía mucho y no podía respirar. Al rato vinieron todos los médicos a echarme la bronca por no haberme hecho la prueba y a decirme que me la tenían que hacer obligatoriamente al día siguiente.
Llego el día siguiente y yo estaba muy preocupada por lo que iba a pasar pero me relajé y cuando vino la enfermera me pudieron hacer la prueba tranquilamente y cuando todo terminó me di cuenta de que me la tenía que haber hecho desde el principio. Hoy también me la han vuelto a hacer y no me he quejado, además no duele nada.
Y ahora, por haberme dejado, me voy del Hospital pero me va a dar pena en parte porque he conocido en el aula hospitalaria a mucha gente súper maja y me lo he pasado muy bien.
Natalia, 13 años.